“La migra” lidera abusos contra connacionales

Migrantes mexicanos que han muerto por descargas eléctricas, disparos, golpes y gas pimienta, así como víctimas de lesiones, abusos sexuales o de autoridad, integran la lista de casos documentados por el gobierno federal en la última década como “violaciones graves a los derechos humanos” cometidas en Estados Unidos, con un factor común: los responsables han sido servidores públicos de ese país, en su mayoría agentes policiacos. 

En esta administración se contabilizan 70 casos en territorio estadounidense, de 363 registrados desde el año 2000 a la fecha, de acuerdo con un reporte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) que ha dado seguimiento a estos incidentes a través de la red de protección consular en EU. 

Esta cifra es independiente al número de connacionales muertos en su intento por cruzar la frontera con ese país. 

El documento estadístico es elaborado por la Dirección General de Protección a Mexicanos en el Exterior, que encabeza Daniel Hernández Joseph, quien dijo que “con un solo caso que haya es preocupante y debe atenderse”. 

En los casos registrados por la Cancillería desde el año 2000, la relación de autoridades involucradas en la violación de las garantías de mexicanos migrantes es amplia, aunque el primer lugar lo tiene la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, a cuyos elementos se le atribuyen 28 muertes de connacionales por causas que incluyen disparos de arma de fuego, descargas eléctricas, golpes y negligencia. 

La muestra 

El caso más reciente, incluido en esta estadística, ocurrió el 4 de enero de 2010, cuando el mexicano Jorge Alfredo Solís Palma murió tras ser baleado por un agente de la Patrulla Fronteriza en la zona de Douglas, en Arizona. 

La Patrulla Fronteriza, según este registro, está también implicada en 187 casos en los que migrantes mexicanos han resultado heridos, en 25 de ellos por armas letales, aunque la mayoría de las agresiones documentadas son por golpes (125 casos); 23 atropellamientos, así como actos de acoso y abuso sexual. 

En suma, la Patrulla Fronteriza se ha visto involucrada en 215 de todos los casos registrados desde el año 2000, lo que equivale a 59.2%. 

Destaca que 104 de esos reportes de violaciones a las garantías se concentran en los elementos de esa corporación que operan en Arizona —Nogales, Douglas, Tucson y Yuma—; el resto de incidentes, 69 casos ocurrieron en condados de Texas y 42 más en San Diego, California. 

Otros implicados 

Aunque el informe de la SRE revela que en la lista de autoridades estadounidenses involucradas en violaciones graves de derechos humanos de mexicanos migrantes están policías locales con 88 casos y 23 más que implican directamente a alguaciles o sheriffs de condados, seguido por 15 incidentes con servidores públicos de penitenciarias. 

Esta relación incluye 15 casos cometidos por autoridades de la Oficina de Inmigración y Aduanas, a elementos del servicio de Marshall, policías de caminos y la montada. 

De los 363 casos a los que la Cancillería ha dado seguimiento, 78 aún están pendientes y 250 se resolvieron de forma desfavorable para las víctimas. 

Ir a la nota fuente