ICE detendrá a mujeres embarazadas para cumplir con una orden ejecutiva de Trump

El Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) está poniendo fin a su política de liberar a las mujeres embarazadas de la detención, según indicó la agencia a Univision Noticias.

La agencia argumenta que este cambio es para cumplir con la orden ejecutiva titulada ” Mejorando la seguridad pública en el interior de Estados Unidos“, firmada el 25 de enero de 2017 por el presidente Donald Trump.

“Para alinearse mejor con la orden ejecutiva del presidente, ICE ha terminado con la presunción de liberación para todas las detenidas embarazadas”, indicaron portavoces de ICE a Univision Noticias vía correo electrónico, rompiendo así con una práctica general que buscaba dar trato humanitario a mujeres que transitan un período en el que necesitan atenciones especiales.

Con este giro, las mujeres embarazadas solo podrán ser liberadas si un agente de ICE lo determina, ya que se evaluará “caso por caso”.

“Al igual que con todos los detenidos, excepto en los casos de detención obligatoria, ICE hará una determinación de custodia caso por caso teniendo en cuenta los factores especiales”, indicaron.

“Esto no significa que todas las mujeres embarazadas extranjeras serán detenidas, sólo aquellas cuya detención es necesaria para llevar a cabo la deportación, así como aquellas consideradas como un riesgo de fuga o peligro para la comunidad”, agregaron.

Sin embargo, aclararon que, en rasgos generales, la agencia no retendrá a mujeres que estén transitando la etapa final del embarazo. “Generalmente, si no hay circunstancias extraordinarias, ICE no detendrá a una mujer embarazada durante el tercer trimestre del embarazo. Los centros de detención de ICE continuarán brindando atención y educación prenatal en las instalaciones, así como acceso remoto a especialistas para mujeres embarazadas que permanecen bajo custodia”, aseguraron.

Desde su página web, ICE informa que también “garantiza el acceso a asesoramiento y seguimiento posparto y, en ciertos casos, servicios de aborto”.

La política anterior de ICE dictaba que las mujeres embarazadas generalmente no se mantenían detenidas a menos que su detención fuera obligatoria según la ley, o cuando “circunstancias extraordinarias” justificaran la detención.

Los organismos de defensa de derechos civiles reaccionaron de inmediato a la medida tildándola de ‘cruel’.

“Esta nueva política expone aún más la crueldad de la detención y la fuerza de deportación de Trump al poner en peligro la vida de mujeres inmigrantes embarazadas”, indicó en un comunicado Victoria López, abogada de la Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU). “(Esta nueva norma) elimina las protecciones críticas para esta población vulnerable y además elimina los requisitos de informes clave para la supervisión de un sistema de detención que necesita más, no menos, transparencia y responsabilidad”.

El Caucus Hispano del Congreso señala que la nueva política de ICE “aumenta el riesgo de abortos involuntarios y maltrato”.

“El cambio de política de ICE hacia las mujeres embarazadas es inhumano y las expondrá a posibles daños y, sin duda, dará lugar a más abortos involuntarios y complicaciones en el embarazo”, señaló mediante un comunicado la presidenta de ese cuerpo congresional, Michelle Lujan Grisham. “Muchas de estas mujeres embarazadas están escapando de la violencia y el abuso sexual relacionados con las pandillas. En lugar de garantizar que tengan acceso a la atención y el apoyo que necesitan, esta política obligará a las mujeres embarazadas a alojarse en instalaciones de detención inseguras y altamente estresantes”

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