Crisis migratoria en Tijuana requiere un plan más allá del voluntariado: Comité

El Comité Estratégico de Ayuda Humanitaria Tijuana aseveró que, a pesar del intenso apoyo de ciudadanos voluntarios en la atención de migrantes que llegan a Tijuana en su camino a solicitar asilo en Estados Unidos, esta crisis requiere de un plan más allá de la buena voluntad de los tijuanenses y señaló la necesidad de una mayor coordinación con las autoridades.

“Hemos sido testigos de la cantidad de esfuerzos de la sociedad civil, pero aunque nos volquemos a los albergues todos los días y hagamos nuestro mejor esfuerzo, se requiere un plan más allá del voluntariado”, manifestó por medio de un comunicado la integrante del comité Paulina Olvera.

Por su parte, la vocera del grupo de ciudadanos que coordinan las acciones, Soraya Vázquez, alertó sobre que continuamente se abren nuevos albergues ante la creciente necesidad de los recién llegados, pero está situación requiere de mayor coordinación con el gobierno y actualización de información al respecto.

“Nosotros intentamos llevar un control, pero nos damos cuenta de que la realidad avanza más rápido y que hay albergues que nadie ha visitado, ni los tienen registrados. De alguna forma es un alivio saber que hay puertas que se siguen abriendo, pero también es imperativo que el gobierno esté enterado de cuántos albergues son y de lo que sucede dentro de las paredes de esos espacios”, expuso.

Reconoció la excelente intención de voluntarios, sobre todo por parte de iglesias que apoyan, “pero es importante que exista un registro confiable. Saber quiénes son en dónde están, si manejan censos, etc. Ahora se está viendo lo prioritario pero es urgente homologar los procesos de organización”, comenta Vázquez.

También destacó acciones que manifiestan una amplia empatía de la comunidad tijuanense con los extranjeros que aparte muestran la diversidad de formas de apoyar, como la donación de colchonetas para dormir elaboradas con material reciclado y entrega de alimentos al  Albergue “Embajadores de Jesús”, ambos por parte de estudiantes del Cetys.

Además, platillos  donados por una empresa de banquetes a la que le cancelaron un evento, donación de ropa y cobijas por parte de empleados de una empresa telefónica local, así como el acopio de víveres convocado  por el colectivo Telefónica Gastro Park, son campañas que se hacen en nichos pequeños que el Comité ayuda a canalizar.

Actividades  culturales y de integración que permiten un respiro de la situación traumática por la que estas personas están pasando, comenta Soraya Vázquez, así como iniciativas novedosas, por ejemplo la jornada para peinar “trencitas” en la Prepa Ibero o los recorridos organizados con el grupo The Uhuru Movement y Espacio Migrante o con estudiantes de Xochicalco (Ensenada),  que se concretan en visitas a los albergues, con entrega de donativos y convivencia, generando espacios interculturales y de integración.

El Comité sigue trabajando en sus recorridos y exhortando a la sociedad  a que conozca lo que sucede, pero hacen un llamado urgente de las necesidades de los albergues, los cuales se mantienen al tope, y con escasez de víveres, como arroz, frijoles, café, azúcar, huevo, pollo etc., además de cobijas y ropa de invierno.

“Como Comité buscamos ser un enlace entre la sociedad, el gobierno y los albergues… y vemos que una de las partes de esta triada no está llevando a cabo el trabajo con el ritmo que se requiere (…) vemos que quienes tienen la responsabilidad y el presupuesto han manejado un perfil bajo que limita sus gestiones y que impacta lentamente en la realidad”, exponen.

En día recientes  Wilner Metelus/Fundador y Presidente del Comité Ciudadano en Defensa de los Naturalizados y Afro mexicanos ( CCDNAM)  dejó  sobre la mesa  no solo del Comité sino del nuevo gobierno y de la ciudad de Tijuana,  un pendiente latente que se traduce en la necesidad de visibilizar a los albergues, que los sabemos emergentes y con grandes capacidades pero también con fuertes necesidades. Al decir  del Comité,  pensar  en  visibilizar , es referirse  a darles presencia formal, el crédito por el gran trabajo que realizan para evitar el caos , pero también a que tengan la atención que ameritan esos más de  20 espacios que son la única opción que encuentran los migrantes que llegan a Tijuana.

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